A lo largo del tiempo, los descuentos de pagarés en la construcción han sido la manera de financiación que han tenido las pymes, sobre todo las empresas que son más pequeñas, los profesionales independientes y los autónomos.
Cuando se produjo el boom del sector inmobiliario se generó un aumento considerable en el número de empresas constructoras y promotoras inmobiliarias, algo que hizo que fuese fácil obtener dinero gracias a los créditos baratos y auge que se presentó en los precios, razón por la que muchos encofradores y albañiles decidieron montar sus propios negocios en el sector de la construcción,
Muchos de estos emprendimientos se presentaron como sociedades limitadas y en forma de autónomos.
El medio de pago que se usaba comúnmente en el sector de la construcción era el pagaré, por lo tanto el sector construcción también ayudó a generar un impulso para el sector financiero, sobre todo para instituciones como las cajas de ahorro o bancos, aunque también se vieron beneficiadas otro tipo de empresas, como por ejemplo las que ofrecen servicios de descuento de pagarés.
¿Por qué es tan usado el pagaré en el sector de la construcción?
La verdad es que el descuento de pagarés en el sector de la construcción mantiene a dicho sector, pues la mayoría de las pymes y de los autónomos que pertenecen a este nicho dependen del descuento comercial.
Cuando una empresa gana una obra, deben depender de la contratación de otras empresas medianas y pequeñas que se encargan de aspectos especializados, como por ejemplo la fontanería, la carpintería, la electricidad, entre otras, las que a su vez son la parte más débil de la cadena, pues estas soportan toda la financiación del sector, ya que las empresas grandes emiten los pagarés, mientras que las empresas pequeñas se ven en la necesidad de conseguir liquidez con los créditos comerciales.
¿Los pagarés de la construcción son solventes?
La verdad hay que aclarar que aunque anteriormente los pagarés del sector inmobiliario significaban solvencia, hoy en día esto se ha resentido, ya que el crecimiento inmobiliario permitió que cualquier empresa, incluyendo a las sociedades limitadas de capital mínimo legal fueran empresas solventes en este sector.
A estas empresas no les faltaba dinero, ya que los precios que tenían las obras y las viviendas aumentaba de forma acelerada, por lo tanto los bancos estaba en la disposición de brindar financiación, pues otorgar estas financiaciones a un promotor de viviendas le permitía al banco captar hipotecas y después que se entregan las viviendas se generaba la subrogación del préstamo hipotecario promotor.
¿Qué ventajas existen?
La principal ventaja que tiene una línea de descuento de la construcción es que la parte contratista o el subcontratista, puede generar una remesa en la que se incluyan todos los pagarés de sus clientes, y así acceder al descuento de una vez, siempre y cuando no se supere el límite de crédito máximo, y de esta manera tener liquidez para afrontar pagos.